¿Es la democracia occidental un simple conglomerado de ideales, o es algo más? ¿Es la culminación de un desarrollo histórico-social propio del mapa occidental? Las revueltas del mundo árabe dadas en las últimas semanas nos hacen plantearnos un sinfín de preguntas e inquietudes. Las multitudes piden a gritos una "democracia", algo impensable en dichas regiones hace apenas unos meses.
Siempre que se lee la palabra democracia vienen a nosotros unos ideales, una historia determinada -dependiendo de cada región-, unos valores en los que hemos sido educados y una fuerte carga política. Lo que me pregunto es si el modelo democrático es algo así como una ideología volátil, en donde cada cual pueda exigirla para si o para una comunidad de forma instantánea, o si en cambio se necesita de un proceso fuertemente marcado por las situaciones culturales, políticas, económicas, sociales, religiosas y un largo etc. para poder empezar a construir tal edificio.
Decir que sí conlleva, bajo mi punto de vista, pensar que un proceso acaecido en un momento histórico determinado por una cultura determinada es extrapolable a otro suceso parecido en otro tiempo y lugar totalmente diferentes. Algo así como que los movimientos sociales son un corta y pega siendo la historia el almacén para realizar dicho collage. Por otro lado, afirmar un no implicaría nefastas consecuencias para la conciencia. Pues sería privar al ser humano de unos derechos e inquietudes que le vienen de por sí, inalienables, como la igualdad, la libertad, la libertad de opinión, de reunión, la separación de poderes, de credo, de ideología política y miles de procesos que disfrutamos la mayoría de habitantes del mundo occidental. Pero aún así, nacen nuevas preguntas; ¿Es la democracia el mejor modelo político? ¿Sólo la democracia puede recoger esos valores? ¿Es la democracia algo universal a todo ser humano como la libertad? ¿De ser así, la democracia sería algo natural al ser humano como lo es el respirar? Como veis, el debate esta servido...
Ante una pregunta tan compleja una respuesta simple, aunque espero que no simplista. No creo que el modelo democrático occidental, fraguado durante toda la Modernidad, sea exportable tal cual al mundo árabe. Uno, entre otros muchos, de los motivos por los que el sistema democrático y parlamentario fue triunfando, sin atender ahora a aspectos fundamentales como el modelo económico capitalista, fue por la paulatina agonía y posterior muerte de Dios, de la que el juez Nietzsche levantó acta de defunción. Un modelo social que pretende hacer horizontal el valor de sus componentes casa mal con un modelo vertical donde Dios está arriba y el sujeto social debajo. Por parafrasear a Sánchez Ferlosio, mientras no cambien los dioses, nada habrá cambiado.
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